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Elizabeth Bennet
Elizabeth Bennet
GENERALIDADES
►NOMBRE COMPLETO: Elizabeth Izabella Bennet
►APODO/S: Liz, Lizzy, Lizie, Liza, Liza, Eli, Eliza, El, Beth
►FECHA DE NAC. Y EDAD: 7 de diciembre 17 añitos
►LUGAR DE NACIMIENTO: Inglaterra
►ESTATUS DE SANGRE: Hija de muggles
►CURSO: 7º
►O.SEXUAL: Heterosexual
D. PSICOLOGICA
Está llena de vitalidad, efervescente, ardiente, entusiasta, una apasionada. Muy explosiva, su hiperemotividad la hace pasar por un caleidoscopio emocional asombroso: risas y llantos, arrebatos irreflexivos y cóleras injustificadas, alternativamente, en pocos segundos. Generosa, posee un carácter íntegro y tiene horror de las medias tintas: para ella, las cosas son blancas o negras, el gris no forma parte de su arco iris, y la diplomacia no es una de sus cualidades esenciales. Tiene una gran sed de poder, al punto de abusar de ella, a veces, ya que autoritarismo y despotismo están estrechamente vinculados. Su dinamismo y su necesidad de acción hacen que no soporte estar sin hacer nada, o permanecer ociosa. Posee demasiada energía que, si no se canaliza, rápidamente puede transformarse en agresividad y brutalidad. Se muestra intrépida, rebelde y desobediente. Es celosa y posesiva. Tiene numerosos problemas, pero fáciles de detectar: es una persona íntegra, inocente, franca directa, necesita medirse con los demás, estimulada por la competición.
Enemiga de las mentiras, de los halagos y de la injusticia, a Elizabeth le gusta conquistar, luchar, enfrentarse y superarse. Se complace dirigiendo y haciéndose cargo de los demás. Extremadamente impaciente, quiere que todo vaya rápido, lo que hace que se irrite al encontrar un obstáculo. Sin embargo, sabe bastante lo que quiere y alcanzará sus objetivos, gracias a su dinamismo, su sentido de la oportunidad y su magnetismo personal, sobre todo porque no se caracteriza por su flexibilidad ni su indolencia. Su sueño, realizable, es brillar, ser un ejemplo para los demás, elevarse, para llegar hasta las más altas cumbres. Está dispuesta a realizar todos los esfuerzos necesarios. En amor, necesitará admirar a su compañero y será sensible a su posición social, en primer lugar, o al menos a su inteligencia. Pero como su esencia es la dominación, ¡no le resultará fácil admirar y dominar a un mismo hombre! Le gusta influenciar a los demás, y rápidamente se muestra tiránica. Pero en el fondo es una sentimental, aunque las apariencias muestren lo contrario. Sus relaciones afectivas son complejas, hechas de una mezcla de poder, de posesividad, de celos y de excesos. Tendrá que enfrentarse con un hombre viril, fuerte, autoritario, que deberá ganar con esfuerzo su posición de amo indiscutible. Entonces, Lyz, respetuosa y domada, sabe que se volverá tan dulce como la miel…
Enemiga de las mentiras, de los halagos y de la injusticia, a Elizabeth le gusta conquistar, luchar, enfrentarse y superarse. Se complace dirigiendo y haciéndose cargo de los demás. Extremadamente impaciente, quiere que todo vaya rápido, lo que hace que se irrite al encontrar un obstáculo. Sin embargo, sabe bastante lo que quiere y alcanzará sus objetivos, gracias a su dinamismo, su sentido de la oportunidad y su magnetismo personal, sobre todo porque no se caracteriza por su flexibilidad ni su indolencia. Su sueño, realizable, es brillar, ser un ejemplo para los demás, elevarse, para llegar hasta las más altas cumbres. Está dispuesta a realizar todos los esfuerzos necesarios. En amor, necesitará admirar a su compañero y será sensible a su posición social, en primer lugar, o al menos a su inteligencia. Pero como su esencia es la dominación, ¡no le resultará fácil admirar y dominar a un mismo hombre! Le gusta influenciar a los demás, y rápidamente se muestra tiránica. Pero en el fondo es una sentimental, aunque las apariencias muestren lo contrario. Sus relaciones afectivas son complejas, hechas de una mezcla de poder, de posesividad, de celos y de excesos. Tendrá que enfrentarse con un hombre viril, fuerte, autoritario, que deberá ganar con esfuerzo su posición de amo indiscutible. Entonces, Lyz, respetuosa y domada, sabe que se volverá tan dulce como la miel…
LÍNEA FAMILIAR
►PADRE:Un completo desconocido
►MADRE: Emilie, de bonita figura y modales desenfadados, agradable, grácil y coqueta, pero descortez y arrogante respecto a sus hijas. Nunca quiso ser madre y se lo dejó claro a sus hijas, abandonándolas. Aunque se ven tres o cuatros veces al año, lo hacen solo por unos minutos y es más un intercambio frío que otra cosa. Actualmente debe rondar los 40 y continua con su labor de meretriz
►HERMANOS: Jane, hermosa única, bruja y su mejor amiga. Ella es especial con todas las letras, es menor que Lizzy y por eso la protege como a nadie más, la admira y respeta. Le parece la chica más hermosa del mundo y mataría o se dajaría matar por ella.
►OTROS: --------
HISTORIA
Elizabeth fue producto de un rebolcón e una noche con dinero de por medio, quizá fue este el motivo por el que su madre la despreció desde su nacimiento, o más atrás aún, desde que supo de su embarazo. Nunca tuvo demasiado cuidado su hija, pues jamás deseó tener una. Ni bien la tuvo, la dejó en un orfanato para que alguien mínimamente responsable se hiciera cargo de la niña. No mucho después trajo otra niña al mundo y por increíbles que fueran las circunstancias la dejo en el mismo orfanato declarando que eran hermanas de padre y madre, aunque nunca confesó quien era dicho progenitor, a la segunda niña le llamó Jane y lo poco que le informaron sirvió para que estrecharan una relación entre ambas hermanas. Pero por una extraña razón que ni Emilie ni Lizzy ni Jane pueden explicar, se mantuvieron en contacto, una relación pésima ciertamente, pero relación al fin. Quizá fue por su ascendencia o por su carácter un tanto fuerte y a veces hasta grosero, pero Elizabeth no fue adoptada, tampoco lo fue Jane aún hoy a sus 17 y 16 años respectivamente siguen viviendo en ese martirio de orfanato en que su madre las abandonó.
Elizabeth nunca encontró su lugar en la sociedad, ahora se lo explica por la magia que corre en sus venas, pero en su época escolar, cuando desconocía de la existencia de más personas de su especie, creyó que esto se debía exclusivamente a que era mucho mejor que el resto, que tanto ella como su hermana eran más listas que el vulgo. Su intelecto siempre más despierto, sus capacidades más desarrolladas, su lógica superando cualquier problema que se presentara, sus emociones fieramente reservadas para ella, pero claro siempre solas, nunca, ni un solo compañero se acercó a ellas a tenderle la mano, a pedirles su amistad, a jugar con ellas. Eso por supuesto forjó su carácter, uno fuerte y bastante violento. Sintió en su propia piel el odio por todos aquellos que alguna vez intentaron enfrentarse a ella, débiles, cobardes, todos recibieron su merecido. Cada uno de ellos obtuvo lo que merecía y ella se regocijaba en sus venganzas. Su hermana una aliada inseparable que bajo todas las circunstancias le apoyaba sin pensarlo y ella devolvía todos sus favores apoyándola a su vez.
Pero entonces allí estaba en ese enorme castillo, le parecía aun un sueño, yo no sabía muy bien que esperar, en verdad me llamaba bastante la atención, todo lo que veía a mi alrededor era nuevo y extraño, pero sentía que me encontraba en el sitio correcto. Cuando me informaron mediante una carta traída por una lechuza, que era una bruja y que el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería me esperaba, que había una plaza para mi, me había sentido un tanto escéptica, escepticismo que compartía con Jane, desde hacía mucho creíamos que nuestra mente era la que provocaba todas esas cosas, y acababa resultando que en verdad era una bruja, sin duda si yo lo era, ella también lo era. Mientras me movía en busca de la lista de cosas que se me pedía, supe que si por algún asomo de valentía, duda o lo que fuera alguno de mis compañeros del orfanato o escuela me había jugado una mala pasada lo lamentarían.
Pero parecía ser que todo era real, allí estaba bajo un techo encantado, del que me había informado en un libro, con cientos quizá miles de velas flotando a mi alrededor, con un grupo de estudiantes tan miedosos que hasta estaban fastidiandome. Delante de mi había una mesa presidencial, en la que se encontraban personas de mayor edad, supuse que magos y brujas adultos, fuera lo que fuera me estaba gustando este sitio.
Al cabo de unos minutos, vi que eramos llamados hasta un taburete, donde alguien a quien yo desconocía nos colocaba un sombrero en la cabeza, que hablaba, curioso pero no impresionante, había visto este tipo de efectos especiales en alguna de las pocas películas que había alcanzado a ver por televisión. Vi entre los primeros llamados, que tal como el sombrero decía el nombre de una de las casas, cosa que también estaba en el libro, una de las mesas se levantaba aplaudiendo de forma efusiva al nuevo miembro. Echó una ojeada por las cuatro mesas, le daba realmente igual, mientras le dieran la bienvenida y comenzara a encontrarse con sus iguales le bastaba. "Bennet, Elizabeth" Sonó su nombre y de inmediato fue al sitio esperando le dijeran a que casa iba a pertenecer. Varios minutos después el sombrero gritó "RAVENCLOW" y en ese instante supe que mi vida había dado un giro. Me uní a la mesa que lucía un águila en el escudo, allí fui bien recibida y allí comenzó mi vida.
Poco a poco me fui enterando de la magia, de la historia, de los sucesos de ese mundo desconocido para mi hasta mis once años y aprendí que en todo existe el bien y el mal, los magos buenos y los malos, me acostumbré a trabajar bajo el estandarte de los inteligentes y aunque hasta a mi misma me asombraba me acostumbré a socializar y hasta a hacer amigos.
Elizabeth nunca encontró su lugar en la sociedad, ahora se lo explica por la magia que corre en sus venas, pero en su época escolar, cuando desconocía de la existencia de más personas de su especie, creyó que esto se debía exclusivamente a que era mucho mejor que el resto, que tanto ella como su hermana eran más listas que el vulgo. Su intelecto siempre más despierto, sus capacidades más desarrolladas, su lógica superando cualquier problema que se presentara, sus emociones fieramente reservadas para ella, pero claro siempre solas, nunca, ni un solo compañero se acercó a ellas a tenderle la mano, a pedirles su amistad, a jugar con ellas. Eso por supuesto forjó su carácter, uno fuerte y bastante violento. Sintió en su propia piel el odio por todos aquellos que alguna vez intentaron enfrentarse a ella, débiles, cobardes, todos recibieron su merecido. Cada uno de ellos obtuvo lo que merecía y ella se regocijaba en sus venganzas. Su hermana una aliada inseparable que bajo todas las circunstancias le apoyaba sin pensarlo y ella devolvía todos sus favores apoyándola a su vez.
Pero entonces allí estaba en ese enorme castillo, le parecía aun un sueño, yo no sabía muy bien que esperar, en verdad me llamaba bastante la atención, todo lo que veía a mi alrededor era nuevo y extraño, pero sentía que me encontraba en el sitio correcto. Cuando me informaron mediante una carta traída por una lechuza, que era una bruja y que el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería me esperaba, que había una plaza para mi, me había sentido un tanto escéptica, escepticismo que compartía con Jane, desde hacía mucho creíamos que nuestra mente era la que provocaba todas esas cosas, y acababa resultando que en verdad era una bruja, sin duda si yo lo era, ella también lo era. Mientras me movía en busca de la lista de cosas que se me pedía, supe que si por algún asomo de valentía, duda o lo que fuera alguno de mis compañeros del orfanato o escuela me había jugado una mala pasada lo lamentarían.
Pero parecía ser que todo era real, allí estaba bajo un techo encantado, del que me había informado en un libro, con cientos quizá miles de velas flotando a mi alrededor, con un grupo de estudiantes tan miedosos que hasta estaban fastidiandome. Delante de mi había una mesa presidencial, en la que se encontraban personas de mayor edad, supuse que magos y brujas adultos, fuera lo que fuera me estaba gustando este sitio.
Al cabo de unos minutos, vi que eramos llamados hasta un taburete, donde alguien a quien yo desconocía nos colocaba un sombrero en la cabeza, que hablaba, curioso pero no impresionante, había visto este tipo de efectos especiales en alguna de las pocas películas que había alcanzado a ver por televisión. Vi entre los primeros llamados, que tal como el sombrero decía el nombre de una de las casas, cosa que también estaba en el libro, una de las mesas se levantaba aplaudiendo de forma efusiva al nuevo miembro. Echó una ojeada por las cuatro mesas, le daba realmente igual, mientras le dieran la bienvenida y comenzara a encontrarse con sus iguales le bastaba. "Bennet, Elizabeth" Sonó su nombre y de inmediato fue al sitio esperando le dijeran a que casa iba a pertenecer. Varios minutos después el sombrero gritó "RAVENCLOW" y en ese instante supe que mi vida había dado un giro. Me uní a la mesa que lucía un águila en el escudo, allí fui bien recibida y allí comenzó mi vida.
Poco a poco me fui enterando de la magia, de la historia, de los sucesos de ese mundo desconocido para mi hasta mis once años y aprendí que en todo existe el bien y el mal, los magos buenos y los malos, me acostumbré a trabajar bajo el estandarte de los inteligentes y aunque hasta a mi misma me asombraba me acostumbré a socializar y hasta a hacer amigos.
OTROS DATOS
► Pertenencias / Mascotas: ------
► Varita: Cerezo, 26,5cm flexible, pluma de fénix
► Patronus: Gacelas
► Otros datos: Guarda un viejo anillo con un rubí que encontró en una caminata.
Tabla creada por Will Rosenberg para SC
Última edición por Elizabeth Bennet el Lun Feb 25, 2013 12:33 pm, editado 1 vez
Elizabeth Bennet- Mensajes : 227
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